La gran banca española lidera la rentabilidad en Europa con tipos elevados
BBVA y Santander destacan entre los colosos europeos con el RoTE más alto
El fuerte endurecimiento de la política monetaria orquestado por el Banco Central Europeo (BCE) le ha venido de lujo a la banca del Viejo Continente. La fiesta se extendió prácticamente a la totalidad del sector, y muchas de las entidades financieras pudieron acariciar beneficios históricos en los últimos dos años, impulsados por una partida de ingresos más alta. Pero en términos de rentabilidad, en los primeros nueve meses de 2024, la medalla de oro la ganó la gran banca española que, junto a la italiana, superó la media europea, beneficiada por una mayor sensibilidad a la subida de tipos de interés.
De enero a septiembre, la rentabilidad sobre patrimonio tangible (RoTE) de los grandes bancos españoles se situó por encima del 15% —con la excepción de Sabadell y Unicaja—, cuatro puntos más que la media europea, según datos elaborados por Neovantas. “Muchas entidades han batido las expectativas que barajaba el mercado y todas estarían cubriendo el coste de capital o estarían muy cerca de hacerlo, salvo Unicaja”, apuntaron desde la consultora.
La mayor sensibilidad a la subida de tipos se debe al modelo de negocio. La cartera de clientes de la banca española está muy sesgada por clientes con hipotecas, sobre todo a tipo variable, que se han reapreciado con el avance del euríbor. “Este producto es un gran generador de margen de intereses”, apuntó José Luis Cortina, presidente de Neovantas. En cambio, en otros países, como Alemania o Reino Unido, la cartera hipotecaria tiene menor peso y, dentro de ella, los préstamos con cuotas fijas son más comunes.
Costes bajo control
Una rentabilidad más alta se debe también a la capacidad de mantener los costes bajo control, que le brindó a las entidades españolas una ratio de eficiencia más atractiva que la media europea, al situarse en torno a un 40-45%. “En los últimos 10 años, la banca española ha tenido un proceso de reestructuración y consolidación más fuerte que en otros países, conllevando una reducción de costes muy agresiva. Han echado a mucha gente y han cerrado muchas oficinas”, agregó Cortina. Las uniones CaixaBank-Bankia y Unicaja-Liberbank fueron claros ejemplos.
Acotando el análisis al negocio nacional, Santander destacó como la entidad más rentable, al gozar de un RoTE que superó con creces el 20% (21,8%). Le siguió BBVA, con una rentabilidad a nivel grupo del 20,1%, ya que el banco no suele desglosar esta métrica en sus diferentes mercados. Bankinter también entró en el podio con un RoTE del 18,2%, seguido a poca distancia por CaixaBank (16,9%). Por su parte, Sabadell se quedó por debajo del 15% (14,3%) y el farolillo rojo fue Unicaja (6,8%). Eso sí, aunque la entidad malagueña se quedó por detrás de sus competidores, logró incrementar su rentabilidad casi un 48% comparado con hace un año. La banca italiana también presumió de un RoTE más alto que la media europea: el de UniCredit subió 1,4 puntos porcentuales en su variación interanual, hasta un 19,7%.
Menos alegría en otros países
En el resto de Europa, los resultados fueron gratificantes, pero la euforia fue más controlada. En Francia, Crédit Agricole (14,5%) se quedó por delante de BNP Paribas (11,8%) —el más grande del país— y Société Générale (9,6%). El alemán Deutsche Bank mejoró su rentabilidad en casi tres puntos porcentuales desde el año pasado y alcanzó un 10,2%, pero aun así estuvo por debajo de la mayoría de la banca española. En Países Bajos, ING cerró los primeros nueve meses del año con RoE (retorno sobre capital), otra métrica de referencia para medir la rentabilidad de un banco, del 13,8%. En Reino Unido, HSBC se anotó un RoTE del 19,3%, en línea con las entidades españolas e italianas, mientras que la rentabilidad de Barclays (12,3%) y Lloyds (14%) se quedó rezagada.