Musk tumba los presupuestos de EEUU: el ‘presidente en la sombra’ ordena un cierre del Gobierno y desata otra crisis
- El fundador de Tesla presiona a los republicanos para votar en contra
- El país se aboca a otro mes de funcionarios sin sueldo, en plenas Navidades
- Medios y diputados se burlan del ‘presidente Musk’ y sus órdenes al ‘vicepresidente Trump’
Queda casi un mes exacto para que Donald Trump tome posesión como presidente, y EEUU ya está reviviendo los meses de caos político de su anterior presidencia. Este jueves, demócratas y republicanos iban a votar una prórroga de los presupuestos durante tres meses para poder irse de vacaciones de Navidad en paz y dejar margen para que el próximo Gobierno negocie las Cuentas del próximo año en febrero, cuando eche a andar. Pero el ‘copresidente electo’, Elon Musk, ha decidido que el país se merece una buena crisis política como regalo de Papá Noel y ha ordenado a los diputados republicanos votar no a la prórroga, abocando al país a un nuevo cierre del Gobierno.
El primer disparo lo dio en su cuenta de X, donde el hombre más rico del mundo pasa la mayor parte del día. Musk tuiteó una amenaza a sus diputados: “Todos los que voten por el acuerdo presupuestario deberían perder su escaño” en las próximas elecciones. A continuación, publicó una serie de bulos (como que los diputados se van a subir su salario en 60.000 dólares, cuando en realidad se lo iban a subir en 6.000 dólares tras 16 años de congelación de sueldos, o que iba a financiar centros de armas bioquímicas) y memes. Y terminó con una orden clara: “El Congreso no debe aprobar leyes hasta el 20 de enero”, cuando Trump vuelva a la Casa Blanca.
Inmediatamente, una ristra de diputados y senadores republicanos anunciaron que votarían en contra del acuerdo presupuestario, dándole las gracias a Musk por ordenarles no hacerlo. Uno de ellos, el senador libertario Rand Paul, propuso que el propio Musk fuera elegido presidente del Congreso, en vez del republicano Mike Johnson. Y, poco después, Trump salió a decir que también estaba en contra de la ley, junto a su vicepresidente electo, JD Vance, que ha escrito en X que los republicanos tienen que “ser listos” y provocar crisis políticas y económicas cada vez que tengan que negociar con los demócratas.
La escena ha causado estupefacción en Washington. Diputados y periodistas han empezado a referirse al “Presidente Musk, vicepresidente Trump y asistente del vicepresidente Vance”, burlándose de la forma en que los dos cargos electos han ido detrás del que, oficialmente, no es ni político. Además, el tono grandilocuente del fundador de Tesla ha llamado la atención: “EEUU es para vosotros, amado pueblo” o “La voz del pueblo es la voz de dios”, rezan dos de sus tuits recientes. Los medios han empezado a compararlo con declaraciones típicas de dictadores iluminados.
No solo eso, sino que parece haber disenso entre Trump y el ‘primer colega’, como se autodenominó Musk. El hombre que oficialmente será presidente dentro de un mes ha pedido “eliminar el techo de la deuda” antes de que tome posesión para que pueda incurrir en todo el déficit que quiera sin tener que negociar con los demócratas, mientras que Musk quiere lo contrario: mantenerlo, pero recortar drásticamente el gasto público para que no sea necesario emitir más deuda.
Los demócratas, cuyos votos son necesarios para aprobar cualquier cosa, ya que las normas del Senado requieren una mayoría bipartidista para aprobar leyes, han dejado claro que “no van a subir el techo de la deuda para que los republicanos puedan recortar las pensiones”, en palabras de su líder en el Congreso, Hakeem Jeffries. Aun así, no estarían en contra de eliminar el techo de la deuda para siempre: EEUU es uno de los pocos países donde el Congreso tiene que autorizar las emisiones de deuda pública, y los republicanos lo han usado varias veces en la última década para presionar a presidentes demócratas, la última vez en 2023.
Aunque el diputado demócrata Sean Casten puntualizó que el verdadero problema viene de la ingobernabilidad interna del Partido Republicano. “Desde que ganaron la Cámara de Representantes hace dos años no han aprobado un solo presupuesto, hemos estado viviendo a base de prorrogar los de 2022 cada pocos meses”, apuntó. Teniendo en cuenta que los republicanos tienen, sobre el papel, una mayoría absoluta, el problema es que ellos mismos son incapaces de ponerse de acuerdo entre sí. Una situación que no tiene ningún viso de mejorar en la próxima legislatura, ya que han perdido dos escaños y su mayoría será aún más pequeña.
Lo que sí parece irreversible es que la prórroga presupuestaria se irá a pique, y ambos partidos tendrán que volver a negociar todo desde cero, en medio de las fechas navideñas, y con miles de funcionarios castigados sin sueldo. Hasta ahora, el récord del cierre del Gobierno más largo de la historia lo tenía Trump, con 32 días en 2018-2019. Y parece que Musk quiere que Trump bata su propio récord nada más volver al poder.
